Un tratamiento con esencias florales siempre es una opción adecuada a una situación, hecho o vivencia que ha desestructurado nuestra energía y por lo tanto nuestra capacidad de reacción emocional para poder continuar en unas condiciones óptimas con las tareas de nuestra vida diaria.

Sonia Mantovani en su libro “CURARSE CON LAS FLORES DE BACH. Un extraordinario método natural para transformar cualquier estado de ánimo negativo y recobrar el equilibrio”, nos dice que la floriterapia o terapia basada en el uso de las flores de Bach, es uno de los métodos de tratamiento holístico más completos que existen para conseguir que las personas sean conscientes de su propia condición.

Bach consideraba la intuición un criterio natural e imprescindible para poder efectuar una elección correcta de los remedios; ofreciendo a las personas la posibilidad de conocerse, de interactuar consigo mismos y alcanzar una mejoría mediante un método sencillo.

La terapia con flores de Bach no está pensada para sustituir al médico, sin embargo, las personas que se vayan adentrando en este mundo de la terapia floral, pueden llegar a dominar su estado de ánimo y poner remedio a diversos aspectos negativos de su carácter.

Con esta terapia podemos alcanzar el equilibrio de la personalidad a través del conocimiento personal. Consiste simplemente en aprender a conocerse a uno mismo.

Para disfrutar de la terapia floral es importante aprender a escuchar tanto las sensaciones del cuerpo como las del alma; de hecho, cada flor emite un tipo de vibración capaz de modificar y corregir un trastorno, o de mejorar cualquier desequilibrio de la personalidad; además, el remedio adecuado favorece el desarrollo del potencial afectivo presente en cada individuo.

En pocas palabras, el mejor médico es uno mismo: del interior de cada individuo debe partir el trabajo de autoconciencia que las flores estimulan y, cuanto mayor sea la atención que cada persona preste a sí misma, mayor será la ayuda que las flores puedan proporcionarle.

Uno de los motivos por los cuales las flores de Bach tienen tanto éxito, además de su indudable eficacia, es la facilidad con la que pueden ser utilizadas, es decir,  la sencillez con la que cada persona puede curarse a sí mismo, a sí misma.