Las raíces de esta planta tienen la característica de que pueden llegar hasta cincuenta metros de profundida buscando acuíferos. Este aceite vegetal, a diferencia de otros, no se enrancia nunca y se puede conservar mucho tiempo con propiedades intactas.
El aceite de jojoba es un aceite vegetal que se obtiene de la baya triturada del arbusto jojoba (simmondsia chinensis). El arbusto de jojoba es nativo del desierto de Sonora, en el noroeste de México y regiones cercanas de Arizona y el sur de California. Es un arbusto leñoso y perenne que puede alcanzar los 4,5 metros de altura. Posee unas hojas de color gris verdoso y un sistema de raíces profundas que le permiten adaptarse muy bien al calor y la sequedad del desierto. Puede vivir de 100 a 200 años, dependiendo de las condiciones ambientales. Crece mejor en lugares con 25 a 45 cm cúbicos anuales de lluvia y temperaturas que raramente descienden por debajo de -4ºC unas pocas horas por la noche. Puede crecer en cualquier tipo de suelo.
Tiene unas flores pequeñas, sin olor ni color, que no atraen a los insectos polinizadores. Son polinizadas por el viento a finales de marzo y dan lugar a un fruto en agosto, que madura en octubre. El fruto es verde y se seca por el calor del desierto. Al desprenderse su capa externa afloran las semillas, del tamaño de una oliva pequeña. Parecen granos de café y contienen un aceite vegetal transparente e inodoro y menos aceitoso que otros aceites comestibles.
La estructura química del aceite de jojoba es diferente de la de otros aceites vegetales. Se trata realmente de una cera líquida poliinsaturada similar al aceite de cachalote, aunque sin su olor a pescado. Está formado por ácidos grasos y ésteres compuestos exclusivamente por alcoholes de cadena lineal. Como cera, el aceite de jojoba es especialmente útil para aplicaciones que requieren control de la humedad, protección y cualidades emolientes. El aceite de jojoba es líquido a temperatura ambiente debido a sus ácidos grasos insaturados. No se oxida ni se vuelve rancio ni se destruye a temperaturas y presiones elevadas. La estabilidad del aceite de jojoba lo hace especialmente útil para aplicaciones cosméticas.
El Aceite de Jojoba aporta ceramidas a la piel, fundamentales para regular la hidratación y equilibrar la secrección sebácea de la piel.
Tiene un color amarillo intenso y luminoso, es fluido y se absorve con gran rapidez sin dejar residuo graso.