El árbol es originario de Australia con hojas dentadas y redondeadas. Este aceite portador es el resultado de la extracción, por prensado en frío, de la grasa de las nueces de macadamia. El aceite resultante, el aceite de macadamia, puede utilizarse en alimentación, aunque por su alto contenido en ácido palmitoleico tiene aplicaciones cosméticas estupendas. Tiene una textura fina y su sabor y aroma puede recordar al del aceite de sésamo.
El Aceite de Nuez de Macadamia contiene principalmente grasas monoinsaturadas:
– Ácido oleico. El Aceite de Nuez de Macadamia es muy rico en ácido oleico omega 9. Tiene propiedades anti-inflamatorias y es idóneo para el cuidado del cutis y para tratar la caída del cabello. Tiene aplicaciones cosméticas similares al Aceite de Oliva o de Argán, ya que ambos son muy ricos en grasas omega 9.
– Ácido palmitoleico. Se trata de un ácido graso monoinsaturado como el ácido oleico, que tiene propiedadaes para cuidar la piel de los factores externos, como el viento o el frío. Es un tipo de grasa ideal para hacer jabones, y para untarse en la piel sin causar sensación grasa. Apto para las pieles grasas.
Las nueces de macadamia son el fruto seco con mayor porcentaje de grasas que existe, superior al 70%.